La finalización de las negociaciones con las FARC es un éxito para toda la región. América Latina vivió el miércoles un acontecimiento verdaderamente histórico con el anuncio de la culminación, con éxito, de las conversaciones de paz entre el Gobierno colombiano y la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias Colombianas (FARC) que pondrá fin a 52 años de guerra civil —la más antigua del hemisferio occidental— y cuyas cifras de víctimas son ingentes: al menos 220.000 muertos, 45.000 desaparecidos y millones de refugiados. El fin de esta tragedia es un éxito sin paliativos tanto de Colombia como de toda la comunidad internacional que ha estado acompañando el proceso, iniciado hace cuatro años con la firma del acuerdo que establecía las bases de las negociaciones, que dieron comienzo oficialmente un 4 de septiembre. Es de justicia subrayar el papel fundamental jugado por el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, quien como ministro de Defensa asestó uno de los golpes más